Se mecen, como en ensueño,
vivos destellos de oro
sobre el bronce sereno de las aguas.
Atardece
y en el aire crepuscular
se siente,
se huele,
se palpa
la blandura de las sombras que suaviza contornos.
Una bandada de aves ha surcado lo alto en alas del silencio.
Mientras el eco de la voz del tiempo
va soplando arena
sobre los ojos…
vivos destellos de oro
sobre el bronce sereno de las aguas.
Atardece
y en el aire crepuscular
se siente,
se huele,
se palpa
la blandura de las sombras que suaviza contornos.
Una bandada de aves ha surcado lo alto en alas del silencio.
Mientras el eco de la voz del tiempo
va soplando arena
sobre los ojos…
No hay comentarios:
Publicar un comentario